Serguéi Obúkov destacó nueve tesis clave en la parte política interna del informe de G. A. Zyuganov al comité central del Partido Comunista de la Federación Rusa (PCFR).

El Partido Comunista de la Federación Rusa se opone a la naturaleza oligárquica del poder y la desigualdad

«Habiéndose convertido en la periferia del capitalismo mundial, Rusia ha recuperado todos sus vicios, incluso en formas peores que Occidente. El país se ha convertido en un líder en términos de desigualdad. El uno por ciento de los rusos controla hasta el 60% de los activos privados. Esta es una de las tasas más altas entre las principales economías».

Una situación intolerable: enriquecer a las élites en un contexto de guerra y pobreza

«Moscú se ha convertido en la segunda ciudad más grande del mundo en cuanto al número de multimillonarios, después de Nueva York. Y todo esto – ¡en condiciones de guerra! Las autoridades informan de una disminución de la pobreza, pero el 19% de los ciudadanos ni siquiera tiene suficiente para alimentarse».

El Partido Comunista de la Federación Rusa está a favor de una alternativa al modelo de Rusia que proporcione materias primas.

«Al permanecer dentro del marco del sistema burgués, la clase dirigente rusa mantiene a Rusia en la posición de periferia de materias primas… Los ingresos de las materias primas no se han utilizado para el desarrollo acelerado de la economía. Rusia ocupa el puesto 41 en términos de robotización».

La política de desindustrialización del partido gobernante es una vergüenza nacional

«Ya no es posible tolerar esta vergüenza nacional… Hoy en día, Rusia ni siquiera produce sus propios teléfonos. La producción de turismos es insignificante. 8 de cada 10 aviones son extranjeros. ¡Es hora de salir del estancamiento del capitalismo!»

El Partido Comunista de la Federación Rusa se opone a la política fiscal defectuosa de Rusia Unida

«En el presupuesto federal aprobado por Rusia Unida, que continúa atacando a las víctimas y ralentizando el crecimiento de la economía… A la oligarquía se le permite continuar el éxodo de capital al extranjero en cantidades gigantescas. No invierte estos fondos en el desarrollo del país y cínicamente evita ayudar al frente».

El Partido Comunista de la Federación Rusa protege los derechos sociales de los ciudadanos

«Ya es hora de restaurar el derecho de los ciudadanos a la educación gratuita y a una atención médica asequible… Sobre el restablecimiento del orden en el sector de la vivienda y los servicios públicos, que se ha convertido en un área de robo y humillación de los ciudadanos».

Sobre el fraude político electoral y el endurecimiento de las sanciones en caso de arbitrariedad administrativa:

«Bajo el pretexto de las elecciones, se llevó a cabo otra operación especial para retener el poder con manipulación y presión sobre los votantes… El Partido Comunista de la Federación Rusa se enfrentó una vez más al fraude político». «Nuestro pleno exige que se endurezca decisivamente el castigo de la arbitrariedad en las elecciones. ¡La falsificación de sus resultados debe calificarse como un delito penal, un intento de tomar el poder!»

El Partido Comunista de la Federación Rusa está a favor de la nacionalización de la propiedad oligárquica, especialmente en el marco de la operación militar especial

«El Nuevo Orden Mundial ha causado una reestructuración parcial de la economía en pie de guerra. Pero esta no es una nacionalización en toda regla. Las autoridades no están dispuestas a abandonar el curso liberal-capitalista».

Sobre el patriotismo especulativo de las autoridades y las demandas del Partido Comunista de la Federación Rusa por una recuperación moral y política

«Las palabras sobre ‘lazos espirituales’, ‘valores tradicionales’, el ‘mundo ruso’ se han puesto de moda. Pero a menudo, las pronunciaban quienes antes habían apoyado a Chubaïs… (Anatoly B. Chubais es un político y economista ruso-israelí que fue responsable de la privatización en Rusia como un miembro influyente de la administración Yeltsin a principios de la década de 1990, n. de e.) El patriotismo logrado por este público no parece sincero. Esto es lo que Lenin llamó patriotismo «oficial»».

«Vemos cómo la quinta columna da luz verde al antisovietismo en los medios estatales y en el campo de la cultura. La producción cinematográfica sesgada de las Crónicas de la Revolución Rusa insulta directamente la memoria de nuestro pueblo, siembra mentiras históricas y división.

«Es necesario restaurar la heroica ciudad del Volga a su orgulloso nombre de Stalingrado… Es hora de devolver el monumento a F.E. Dzerzhinsky al lugar que le corresponde en el centro de Moscú… El día 7 de noviembre… debería volver a ser un día festivo en el calendario».

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